La Fluorita es un mineral de fluoruro de calcio con una dureza de 4 y pertenece al grupo de los Haluros. Su patrón de crecimiento es cúbico, octaédrico o masivo y se presenta en vetas hidrotermales, a menudo en asociación con minerales como el Cuarzo, la Calcita y la Barita.
La Fluorita es famosa por su amplia gama de colores, que puede incluir violeta, verde, amarillo, azul, incoloro, rosa e incluso negro. Las variaciones de color en la Fluorita son causadas por oligoelementos, como hierro, itrio y cerio, así como por la exposición a la radiación durante la formación del cristal. El color también puede cambiar con el tiempo cuando se expone a la luz ultravioleta, lo que da lugar al término "fluorescencia", de ahí el nombre del mineral.
Se han encontrado importantes yacimientos de Fluorita en Alemania, Inglaterra, China, Sudáfrica, Argentina y Estados Unidos (Illinois, Kentucky y Colorado).
Desde el punto de vista energético, la Fluorita es conocida por sus poderosas propiedades limpiadoras. Se cree que ayuda a eliminar las energías negativas y los bloqueos, especialmente en la mente y las emociones. Puede actuar como una "aspiradora psíquica", limpiando la atmósfera de confusión, pensamientos desordenados, negatividad y cualquier tipo de "parásitos" astrales que estén causando problemas en el entorno.
También se sabe que mejora la concentración, la claridad mental y la toma de decisiones, lo que la hace ideal para la meditación, los estudios o cualquier actividad intelectual. También se cree que protege contra la radiación electromagnética y fortalece el campo áurico.
